El Gobierno confirmó este viernes un aumento en las tarifas de electricidad y gas natural, que entrará en vigor a partir de septiembre.
En los próximos días, los entes reguladores publicarán los nuevos cuadros tarifarios, los cuales reflejarán un incremento promedio del 4 % en las facturas que recibirán los hogares, comercios e industrias.
Desde el Ministerio de Economía, sostienen que la desaceleración continua de la inflación permitirá avanzar en el ajuste de tarifas y la reorganización de algunos precios relativos, un proceso que se retomó en agosto.
Las tarifas que pagan los usuarios finales se componen de cuatro elementos: el costo de la energía, el transporte, la distribución y los impuestos. De estos, el Estado subvenciona principalmente el costo de la energía, mientras que el transporte y la distribución no reciben subsidios.
Actualmente, los usuarios están divididos en tres categorías según su nivel de ingresos, de acuerdo con la segmentación de subsidios vigente desde 2022: altos ingresos (Nivel 1), ingresos bajos (Nivel 2) e ingresos medios (Nivel 3).
Según los últimos datos del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), 5,3 millones de usuarios están en el Nivel 1, 8 millones en el Nivel 2 y 2,7 millones en el Nivel 3.
